Comunicado de prensa del Grupo Municipal Socialista de Garrovillas de Alconétar.
El Grupo Municipal Socialista de Garrovillas de Alconétar quiere dejar claro el autoritarismo del alcalde que, una vez más, ha quedado al descubierto, impidiendo el debate y el turno de palabra en los plenos con formas más cercanas a una dictadura que a un sistema democrático.
Es en el turno de ruegos y preguntas, donde el Grupo Municipal Socialista tiene el turno de intervenir para ejercer el mandato de la ciudadanía y su labor de oposición, fiscalizando la gestión del gobierno y exponiendo las dudas que sean necesarias aclarar para que las y los vecinos de Garrovillas, sepan lo que pasa realmente. Pues eso es lo que no le interesa y por ello el alcalde nos lo impide constantemente.
En el pleno de febrero el alcalde llamó al orden tres veces a la concejala socialista, Vanesa Al Borji Nieto, a la que terminó expulsando del salón de plenos. La verdadera razón del alcalde era no querer contestar una pregunta que hizo nuestra compañera. En solidaridad con ella, todos los miembros del PSOE abandonaron el salón de plenos, en clara protesta contra la actitud autoritaria y dictatorial del alcalde.
En el pleno de marzo fue el turno de la portavoz del PSOE, Elisabeth Martín Declara, a quien el alcalde llamó al orden tres veces, pero esta vez Martín Declara se negó, al igual que los demás concejales, a abandonar el salón de plenos, ya que el abuso de poder del alcalde es un bochorno para Garrovillas y la democracia.
El Grupo Municipal Socialista no va a consentir nunca que un alcalde insulte a una concejala, y que luego la expulse del salón de plenos, en una clara muestra de tiranía. El señor Cándido Javier Gil Pizarro ha perdido las formas, usando un sistema de descalificaciones y de faltas de respeto constantes, imponiendo un verdadero atropello a los derechos de la oposición.
Creemos que, por su incapacidad democrática, el cargo de alcalde le viene grande ya que es incapaz de dirigir un pleno ni de buscar el diálogo y los acuerdos necesarios para que hagamos avanzar al pueblo. Y como no tiene argumentos, utiliza su prepotencia que no es otra cosa que el último refugio de un alcalde débil y agotado.
Además de su negligencia y falta de decoro, el alcalde muestra con su desdén y malas formas hacia nuestras compañeras, un machismo inaceptable y contra el que el PSOE lucha día a día, en todas circunstancias y en todos los niveles.
